[COCINEROS Y OTRAS COSAS]

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Desde mi infancia me decanté por el arte, el dibujo, la ilustración, el diseño, pero en el año 1998 mi primera mudanza, con la que abandoné el nido definitivamente y me obligó a cruzarme con la cocina.

Desde entonces como un tatuaje en el brazo de un marinero, no me a dejado de acompañar.

Hace años que me incomoda la pregunta de ¿tú que eres?, ¿a qué te dedicas?

He hecho muchas cosas en mi vida, a veces pienso que demasiadas, pero a este pensamiento cada vez le hago menos caso. Odio profundamente los refraneros, por mucho que se empeñe alguna gente en decir que son sabiduría popular.

«La cabra no siempre tira al monte»

«La cabra no siempre tira al monte» ya que existimos personas que trabajamos en nuestra brújula interior y el sistema de búsqueda lo llevamos de serie desde que nacemos. Trabajamos para ser mejores personas. Sabemos qué significa estar noches sin dormir y llevar grandes pesos a nuestras espaldas por acciones que no nos han salido bien y hemos creado daños colaterales extremos en otras personas que además queríamos o amábamos.

En busca de un propósito…

¿De verdad jamás os habéis preguntado cuál es vuestro propósito en la vida? He de reconocer que a mi a veces esto me angustia, ya que no sé hasta que punto puedo ayudar escribiendo libros, poesías, cocinando, meditando, con terapias naturales… Tengo tantos frentes creativos abiertos que no consigo centrarme en ocasiones y aunque muchos desde fuera ven muy claro que todos esos dones fusionan entre ellos o se enlazan a la perfección, no es tan fácil.

Es entropía, un desorden que no te deja avanzar quizás por que ese no sea el destino y uno debe de vivir sobre este terreno.

Voy a decir algo que parece una memez, pero es cierto y no solemos hacer demasiado caso. Sin AMOR no funciona nada.

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